El uso de nuevas tecnologías genera controversia. Siempre nos encontramos con la dificultad de averiguar si realmente nos son tan útiles.
Cuando una tecnología se implanta en nuestra sociedad impone un cambio importante en nuestras costumbres. Ese cambio conlleva beneficios de los que antes no disfrutábamos, pero también costes nuevos que debemos asumir.
Es difícil averiguar si unos compensan el coste de los otros. Pero hemos de asumirlos ambos.
Un nuevo estudio ha aportado un dato más para valorar este asunto.
La Escuela Técnica de Ingenieros Industriales de la UPM y la Facultad de Psicología de la Universidad de Oviedo, se han unido para profundizar en cómo afecta el uso de los teléfonos móviles a nuestras relaciones sociales.
Los teléfonos inteligentes se desarrollan cada vez más enfocados a facilitar nuestras vidas y mantenernos comunicados. Pero parece ser, que su uso (especialmente si es abusivo) conlleva elevar nuestro nivel de estrés y la perdida de calidad en nuestras relaciones.
En este estudio conjunto, se hizo un seguimiento a 416 participantes durante todo un año. El objetivo era observar la relación entre el nivel de uso del teléfono y el grado de apoyo social.
Los resultados mostraron una correlación entre la adicción al dispositivo y la perdida de apoyo social del individuo. Un uso abusivo del teléfono inteligente parece reducir el número de amistades. Igualmente, afecta a las relaciones familiares y favorece la aparición de más conflictos.
El estudio concluye, que un uso elevado de este dispositivo pensado para mejorar nuestra comunicación, puede tener el efecto paradójico de deteriorarla.
No podemos extrapolar estas conclusiones a toda la población, ya que este estudio se realizó únicamente con estudiantes universitarios. Pero no es el único que trata el tema y encuentra efectos adversos en el abuso de las nuevas tecnologías.
Tampoco debemos alarmarnos en exceso, un uso moderado no parece afectar a las relaciones. Como en muchas ocasiones, la virtud está en el equilibrio.
FUENTE: Herrero, J., Urueña, A., Torres, A., & Hidalgo, A. (2019). «Socially Connected but Still Isolated: Smartphone Addiction Decreases Social Support Over Time». Social Science Computer Review, 37(1), 73-88.
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